Niños mentirosos
Las mentiras infantiles son complejas y muchas veces es dificil
comprender las razones por las cuales ocurren. La comprensión y conciencia acerca de este
fenómeno es importante ya que nos ayuda a prevenir y minimizar su ocurrencia.
Cuando el niño miente podria
estar satisfaciendo necesidades de estima y amor propio. Estas necesidades son originadas
durante su desarrollo y aproximadamente a los 6 años de vida, la acción
responde a la mala intención de hacerlo. En la niñez temprana el estado
psicológico y medio ambiente pueden ocasionar esta acción y mas aún que forme
parte de la vida adulta de las personas.
A la edad aproximada de 3 a 4 años de edad, los niños por medio de estas
experiencias, participan en dinámicas, juegos imaginarios y los comparten con
adultos y/o otros niños. Este proceso les ayuda desarrollar otras áreas
más complejas que impactarán más adelante su desarrollo de personalidad. Las
experiencias durante este proceso pueden promover dos resultados:
·
Que el niño desarrolle un comportamiento de mitomanía
(mentir patológicamente) y viva permanentemente en un mundo de fantasías
aún en su vida adulta.
·
Que aprenda el
valor de la verdad y sea ésta la que adopte como parte del repertorio de
sus conductas éticas- morales.
Las figuras importantes en el cuidado del niño tienen un rol importante
en este proceso. Si en este desarrollo se les provee los cuidados, las
atenciones y se les enseña mediante orientación y modelaje social conductas
asertivas y positivas, el niño desarrollará un valor propio saludable,
permitiéndole balancear sus necesidades personales con las demandas
impuestas por el medio ambiente. Además, desarrollará una identidad sana que
facilitará su adaptación en el mundo social, mediante el deseo de superación
y competencia.
El niño que aprende a decir la verdad se debe en muchos casos al amor
incondicional recibido, atención a sus necesidades afectivas y sociales en este
proceso. Al no sentir que debe mentir para ser aceptado y amado aprenderá
a reprimir el deseo de mentir y por ende, asumirá las consecuencias que
conllevaría hacerlo, por ejemplo, ser castigado por la mala acción incurrida. Las
figuras de importancia afectiva y de
crianza para el niño que no le ofrezcan cuidados y atención en este proceso y
no le enseñen la importancia de decir la verdad como un principio de amor
propio, estarán promoviendo que el niño adopte y aprenda que necesita mentir ya
que de esta forma solo podrá recibir reconocimiento, aceptación e importancia. Esto
podría resultar en el peor de los casos, en psicopatología seria, debido a que
le resultará difícil discernir entre lo que es real e irreal, afectando sus
relaciones sociales en el futuro y optar por vivir una vida de fantasías.
El niño que ha adoptado esta conducta podría hacerlo debido a:
▪ Necesidad de llamar la atención, porque de otra forma
no lo haría y no se siente
importante.
▪ En el hogar no se le permite la expresión genuina de si
mismo, es decir a comportarse en la
libertad que quiera, debido a que existen controles rígidos y
estiloparental autoritario.
▪ En el hogar podría verse normal y natural la conducta
de mentir ante situaciones de
conflicto y/o existen problemas relacionados a inestabilidad emocional. Por
lo tanto, la conducta de mentir, se imita ya que es lo normal para el niño.
▪ El niño es burlado, ridiculizado y desvalorizado en
mostrarse tal y como desea. Por ende,
prefiere mentir y vivir una fantasía para escapar de su realidad
dolorosa (no soy importante).
▪ No se le dedica tiempo a enseñarle que será mejor
niño si aprende a decir la verdad y no se
refuerza positivamente esta acción (decir la verdad).
Es importante otorgar tiempo en
el desarrollo temprano del niño, permitirle mostrarse tal como es y enseñarle
los méritos y la importancia que puede ser para él y los demás hablar con
veracidad. Por lo que, sugiero que en vez de dar atención a las mentiras que
incurre el niño, ofrezca y dedíquele más atención a las razones y los
motivos de la mentira, dándole mayor
importancia a la verdad. Refuércele y enséñele el valor de hablar
con sinceridad y realidad. Promueva toda acción que le permita una autoestima
saludable, seguridad en sí mismo y hablar en el hogar con la verdad. Estas son
solo algunas de las acciones que puede considerar y reflexionar si su niño
miente o está en el desarrollo temprano en la niñez (ya que siempre habrá una
primera vez).
Referencia: www.ub.edu.ar/investigaciones/tesinas/163_lapidus.pdf
Tkach, C. (2005). La mentira Infantil.Tesina.